MM, mm & MMo

octubre 24, 2006

Una sonrisa, por favor.

Filed under: Buen humor — malisimamayor @ 3:15 pm

Edificio de oficinas.

Dependencias del Estado.

Administración encargada, básicamente, del procedimiento sancionador.

Un ascensor que ya utilizaban los egipcios para subir piedras a las pirámides.

Y dentro, el cartel, al que alguien decidió dar el toque que faltaba:

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octubre 17, 2006

Al mal tiempo…

Filed under: Buen humor — malisimamayor @ 12:32 pm

octubre 10, 2006

Una de Maitena…

Filed under: Buen humor — minimalisima @ 8:10 am

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octubre 8, 2006

Así empezó todo…

Filed under: Uncategorized — minimalisima @ 12:19 pm

El principio de las malísimas…

 

carnaval1.jpg

 

… y al final lo conseguimos

octubre 5, 2006

Manía persecutoria.

Filed under: Uncategorized — malisimamayor @ 8:47 pm

Esta tarde he recibido una llamada al móvil. No era para mí, ya decía yo, si a mí no me llama nunca nadie. Una chica al otro lado de la línea ha recitado uno por uno y en el mismo orden todos los números que corresponden a mi teléfono. He estado a punto de cantarle bingo, pero no, por que no era a mí a la Ana María que buscaba.

Y no habría pasado de la mera anécdota si a las dos o tres horas no hubiese recibido otra llamada. Esta vez de un hombre, que ha repetido todos los números. Este buscaba a Don Quiterio (lo siento, me ha tenido que repetir el nombre, no estoy acostumbrada a que llamen a nadie de don). Inmediatamente, tras colgar, me he acordado del primer relato del libro que estoy leyendo, donde una equivocación telefónica lleva al protagonista a perseguir incesantemente a un anciano por todo Nueva York. Y no es que yo me esté volviendo tan neurótica como el Paul Auster del libro (no el autor, sino el otro, que en realidad no se llama así), pero después de que hace un par de días alguien se acomodara en mi correo (me lo imagino ahí, sentado en mi buzón, con la piernecillas colgando y esperando que el cartero dejase algo sustancioso a que hincarle el diente), saltándose a la torera mi contraseña especial anti-hackers, ya no sé qué pensar.

Porque el helicóptero que sobrevolaba hoy mi casa era el del Tulipán, ¿verdad?

octubre 2, 2006

¿Cómo lo titulo? Pues ni idea

Filed under: Uncategorized — malisimos @ 8:06 pm

La casualidad no existe, si no la ilusión de la misma. Todo comenzó en verano del dos mil cinco. Deambulando por los blogs, jugando a la oca de bitácora en bitácora hubo un encuentro en apariencia insulso. Gracioso le resultó por la temática selenita del mismo, pero aún así no dudó en enviarle un correo electrónico para que le resolviera las dudas, es decir, todo sobre la plantilla de su blog. A partir de ahí empezó una relación de maestra a pupilo que está ahora aparcada, ya abusó demasiado de la confianza, pero que tiene visos de retornar en esta nueva bitácora.

 

El tercer elemento de la historia, de soslayo, sin hacer demasiado ruido, infiltró sus armas más poderosas en un grupo ya establecido del cual, como colofón y con alguna ausencia, perpetuó su cometido más amable en carnaval de este mismo año. Naturalmente, hablando de carnaval no podía ser en otro lugar que en la tierra del tercer elemento, conocida en algunos ambientes sospechosos como MM. Los más inocentes pueden pensar que son las iniciales de, pongamos por ejemplo, muy maja. No. Y además, si no tenía suficiente, como buena hechicera que se precie encontró su aprendiz, en este caso aprendiza, aunque la vagancia me impide mirar si el vocablo es correcto, pero igualmente me suena extraño.

 

La maquinación de sus fechorías, sin lugar a dudas, fue realizada  por este medio singular de unos y ceros. Disfrazáronse de psicólogas en pos de la cura traumática de una niñez reprimida, buscaron el tamaño acorde a semejante réplica del peñón de Gibraltar, y vistieron la mejor de sus sonrisas, en confabulación de otros elementos de igual calaña, y también bajo sospecha de ser mejores de lo que aparentan ser.

 

Así llegamos a la idea de plasmar todas las fechorías, maldades y demás situaciones que creamos oportunas en el momento más insospechado. Naturalmente uno no es muy bueno, pero aunque lo fuera, rodeado de tan bella maldad es imposible negarse a caer en la tentación.

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